La canciller de Colombia, María Ángela Holguín, confirmó hoy que se reunirá el próximo 4 de agosto con su homóloga de Venezuela, Delcy Rodríguez, en un lugar por definir, para analizar las posibilidades de reapertura de la frontera común, cerrada en agosto de 2015 por decisión del Gobierno venezolano.
«Tenemos reunión con la señora canciller de Venezuela el día 4 de agosto», declaró Holguín en una conferencia de prensa en Bogotá, y aseguró que todavía no han definido el lugar del encuentro.
Holguín dijo esperar que para entonces «estén finalizadas» las reuniones entre las autoridades de ambos países y se hayan acordado las medidas que cada uno adoptará.
«Hemos venido trabajando muy, muy duro en las últimas semanas con los niveles de las diferentes entidades de los dos países para poder abrir la frontera lo más pronto posible», agregó la jefe de la diplomacia colombiana.
Señaló que los dos países buscan garantizar «una frontera distinta», legal, segura, que «le dé oportunidades a la gente que vive en ella».
«Y no que sea lo que venía siendo y es ese cúmulo de ilegalidades, de falta de control donde realmente lo que estaba pasando con el contrabando de todo tipo de productos hacía que fuera una frontera muy compleja», agregó.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó el 19 de agosto del año pasado el cierre del paso entre el departamento de Norte de Santander y el estado Táchira, y posteriormente extendió la medida a los otros puntos comunes de la extensa frontera común.
Holguín señaló que en los últimos meses se han reunido autoridades migratorias, de aduanas, así como de las Fuerzas Militares y de la Policía de ambos países.
La ministra de Relaciones Exteriores recordó que en los fines de semana del 9 y 16 de julio Colombia permitió la entrada de más de 150.000 venezolanos por varios pasos fronterizos, con su documentos de identidad, sin pasaporte ni ningún otro requisito, para que adquirieran alimentos y medicinas.
Holguín consideró «muy impresionante» la acogida de ese «corredor humanitario», y admitió que también fue arriesgado «desde el punto de vista de seguridad», al exteriorizar su preocupación por el hecho de que uno de los puentes que comunica a ambos países «pudiera sostener esa cantidad de personas pasando».
«Lo que hemos querido es agilizar ese paso de frontera para que podamos tenerla abierta, que los ciudadanos venezolanos puedan venir a Colombia a lo que ellos requieran de compras, de abastecimiento, pero sin arriesgarnos a que pueda pasar algún incidente o algún accidente», agregó Holguín, quien confió en que la reapertura del lado venezolano «sea pronto».
EFE (26/07/2016)