A principios de la década de los 90, mucho antes de la aprobación de la Ley para la Zona Libre para el Fomento de la Inversión Turística en la Península de Paraguaná, ya se había consolidado un moderno complejo hotelero y recreacional en esta parte del estado Falcón: Médano Caribe.

Eran tiempos de bonanza económica y el potencial turístico de la costa cercana ya había sido apreciado por visionarios inversionistas.

En la época, era fácil toparse con reconocidos artistas o personajes importantes del quehacer político y social venezolano, disfrutando de las instalaciones, en las que no se escatimaron esfuerzos para ponerlas al nivel de los mejores resorts del Caribe.

Pero la rimbombancia de Médano Caribe duró poco. Con la intervención del Banco Latino, la institución que financió la obra, el complejo pasó a manos del extinto Fogade y allí empezó el declive.

Los edificios, la vistosa piscina, las canchas de tenis, los salones de fiestas y el resto de las construcciones pasaron a manos del Estado y de ahí fueron puestas en el abandono.

A casi 30 años, lo que queda de aquel emporio son sólo ruinas y el recuerdo de lo que un día fue.

Hubo intentos de que una cooperativa recuperara progresivamente los espacios, pero era tanto lo que había que invertir que el proyecto duró poco.

Ahora, Médano Caribe es el reflejo de la Paraguaná pujante, atractiva y receptora del turismo nacional e internacional, que aún sus habitantes desean que sea.

Cactus24 (30-01-2020)