El coronavirus continúa manteniendo en alerta y varios países del mundo continúan ampliando las medidas para contener su propagación.

El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, cerró sus fronteras del país a cualquiera que no sea ciudadano, estadounidense o residente permanente, y pidió a los canadienses quedarse en casa durante la pandemia.

«Todos los canadienses deben quedarse en casa lo más posible», dijo Trudeau afuera de su residencia, en donde está en cuarentena voluntaria después de que su esposa diera positivo al virus.

El gobernante indicó que su gobierno tomó la decisión basado en recomendaciones científicas y de salud pública, pero que los estadounidenses quedarían exentos a pesar de que aumentan los casos de la enfermedad en Estados Unidos.

La pandemia ha infectado a más de 181.300 personas y ha causado más de 7.100 muertes en todo el mundo.