Las muertes por coronavirus en Estados Unidos superaron el lunes las 130.000, en medio de un incremento de casos de COVID-19 que ha dejado en entredicho el manejo del presidente Donald Trump de la crisis y desbaratado los esfuerzos para reabrir la economía.

La tasa general de incremento en los decesos ha seguido una tendencia a la baja pese a que las cifras han crecido a niveles récord en los últimos días, pero los expertos en salud advierten que las muertes son un indicador desfasado, que se muestra semanas o incluso meses tras el aumento de los contagios.

Al menos cinco estados ya han ido contra la tendencia bajista en la tasa de fallecimientos, según un análisis de Reuters. Arizona contó 449 decesos en las últimas dos semanas de junio, que se comparan con los 259 de la primera quincena. El estado informó un alza de 300% en los casos en el último mes, la cifra más alta del país.

A nivel nacional, los casos se están acercando a los 3 millones, la cifra más alta del mundo y el doble de las infecciones reportadas en Brasil, la segunda nación más afectada.

Dieciséis estados informaron incrementos diarios en los nuevos casos desde el inicio de julio, incluyendo Florida, que confirmó más de 11.000 en un solo día. Además del mayor aumento en un día en el estado a la fecha, el número es más de lo que cualquier país europeo informó en un solo día en el apogeo de la crisis en esa región.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han pronosticado entre 140.000 y 160.000 muertes por coronavirus antes del 25 de julio en proyecciones basadas en 24 pronósticos independientes.

El pronóstico calcula un alza de las muertes en Arizona, Arkansas, Florida, Idaho, Nevada, Oklahoma, Oregón, Carolina del Sur, Texas, Utah y Wyoming, según el sitio web de los CDC.

Cactus24 06-07-20