En el Estadio da Luz de Lisboa el Atalanta y el PSG hubo un duelo de estilos y de presupuesto. La humildad de Bérgamo contra la fortuna parisina. En las primeras de cambio las oportunidades fueron para el Atalanta por medio del Papu Gómez y por el PSG Neymar.

Las riendas las llevaba el «Papu» Gomez quien con un centro hacia la cabeza de Hans Hateboer y una habilitación para Mattia Caldara representaron los recursos más sólidos para ponerse en ventaja, pero la notable actuación de Keylor Navas evitó la conquista italiana. La potencia del colombiano Duvan Zapata fue la clave para que Mario Pasalic rompiera el celofán y con  un extraordinario remate de zurda venciera a Keylor para el 1-0 que ponía a soñar a los de Bergano. 

El único peligro que presentaba el PSG era la genialidad individual de Neymar. Sin embargo, en el complemento Tuchel reemplazó a Pablo Sarabia por Mbappe, Teuchel murió con la suya y le dio entrada a jugadores ofensivos, Draxler, Paredes, Choupo Moting con la intención de buscar el partido.

Por su parte Gasperinin sacó al Papu Gómez y a Berat Djimsiti, para que ingresen José Luis Palomino y Ruslan Malinovski y esos cambios hicieron que la línea de cinco, junto con los tres volantes de contención y algunas libertades para Zapata y Pasalic, fue un desgaste físico desmedido.

Sin embargo, la hazaña se desvaneció para el Atalanta sobre el final, Marquinhos, quien en el minuto 90 empató gracias a su oportunismo y una daga para los italianos quienes aguantaban para ir a la prórroga pero las individualidades salieron a relucir y una triangulación compuesta por Neymar, Mbappe y Eric Choupo-Moting selló el 2 a 1 a favor del equipo francés.

Al equipo francés le toca esperar al ganador del día de mañana entre Atlético de Madrid y RB Leipzig.

Cortesía Desdelasgradas

CACTUS24 12-08-20