Este lunes 10 de agosto fueron levantados los cadáveres de dos reclusos del Centro Penitenciario de Oriente, mejor conocido como cárcel de El Dorado, ubicada en el estado Bolívar. 

Las víctimas presuntamente fallecieron la semana pasada, pero sus cuerpos permanecieron a la intemperie y debajo de un árbol durante cuatro días dentro de las instalaciones del penal.  

Carolina Girón, directora del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), informó que las víctimas fueron identificadas como: Luis Ángelo Perozo Gil, de 29 años de edad, y Jesús Alberto Vergara Ortega, de nacionalidad colombiana y de 26 años de edad. 

Asimismo, Girón detalló que Perozo Gil tiene su causa establecida en el estado Lara. “Se trata de uno de los tantos reos que son trasladados de recinto en recinto y nunca vuelven a su penal de origen”.

Cabe destacar que la cárcel de El Dorado históricamente se ha convertido en una cárcel de castigo para los reclusos venezolanos, pues su ubicación geográfica impide que sus familiares puedan trasladarse con facilidad, además de las condiciones inhumanas a las que sobreviven los reos de este penal. 

“La población de El Dorado es de 1.295 privados de libertad y la mayoría de ellos son oriundos de otros estados, quienes lamentablemente se enferman o mueren ante tanta desidia”, añadió Girón.

Por su parte, los familiares denunciaron que los presos de El Dorado están comiendo arroz o pasta sin proteínas u otro tipo de acompañante, por lo que les preocupa el alto grado de desnutrición que presentan muchos de ellos.  

“Son varios los reos que presentan fiebre, dolores de cabeza y musculares, no sabemos de qué están muriendo y tenemos miedo”, sentenciaron los denunciantes, quienes añadieron que los dos reclusos fallecidos aparentemente también presentaron estos síntomas.

“El Dorado parece un depósito de humanos, los presos que mandan para allá son olvidados por el Gobierno”, comentó un familiar que no quiso ser identificado. 

De la misma forma manifestaron que aunque sí están permitiendo el envío de paquetería, no todos la pueden recibir. “Para los que no somos del estado Bolívar se nos hace imposible viajar hasta allá por la cuarentena obligatoria, mientras que los que son de ese estado no se pueden movilizar por la escasez de gasolina y nos han dicho que cobran muchísimo dinero para trasladarse hasta la cárcel.”

En 24 horas se reportaron tres muertes en Fénix Lara 

Los presos venezolanos son víctimas frecuentes del abandono gubernamental y muestra de ello es la muerte de tres reclusos en menos de 24 horas en la Comunidad Penitenciaria Fénix en el estado Lara. Las causas de muerte fueron desnutrición, tuberculosis e infección respiratoria. 

Alvaro Alberto Hernández Levia, de 32 años de edad, estaba recluido en el Centro Penitenciario David Viloria, mejor conocido como Uribana, y fue trasladado el 9 de julio a Fénix Lara. Lamentablemente falleció el domingo 9 de agosto en el área de enfermería, tras presentar desnutrición severa y dificultad para respirar. 

La familia de Hernández Levia conoció de su muerte a través de una llamada anónima, lo que fue un gran sorpresa porque no tenían ni idea de que el hombre estaba enfermo.

Un día después, el lunes 10 de agosto, murió Ramón Enrique Sulbarán Bravo, de 61 años de edad, quien se encontraba hospitalizado desde el 11 de julio en el Hospital Central Antonio María Pineda de Barquisimeto. Según el diagnóstico médico, falleció por insuficiencia respiratoria y derrame pleural.

En horas de la tarde del mismo lunes, en las instalaciones de Fénix Lara, murió Geomar José Ochoa, de 23 años de edad, quien padecía tuberculosis. 

Asimismo, el pasado viernes 7 de agosto se conoció sobre el fallecimiento de Dany Ganzo, de 37 años de edad, quien padecía tuberculosis y cumplía condena en un recinto penitenciario del estado Carabobo

“No puede haber un muerto más en las cárceles de Venezuela, se trata de una población vulnerable que debe recibir atención médica inmediata. En esta ocasión lloramos la muerte de seis privados de libertad que estaban enfermos y desnutridos, por lo que nos preocupa cuántos más lloraremos en el pasar de los días mientras esta situación se agrava”, puntualizó la directora del OVP. 

Prensa Observatorio Venezolano de Prisiones  

Cactus24/11-08-2020