El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció este lunes una serie de restricciones sanitarias y a la movilidad ante el descubrimiento de la nueva cepa de COVID-19, que parece haber aparecido en el Reino Unido y tiene una mayor transmisibilidad a la anterior.
De esta manera, Ecuador ingresará un estado de excepción durante 30 días. Entre las medidas aplicadas se destacan un toque de queda durante 15 días -entrará en vigor este lunes entre las 10 PM y 4 AM- una ley seca durante el mismo período de tiempo y el cierre de las playas del país los días 24, 25 y 31 de diciembre, así como el 1 de enero.
Moreno también anunció distintas limitaciones de aforo para comercios públicos: se reducirá en un 30 por ciento en restaurantes; 50 por ciento en centros comerciales, que verán sus horarios de apertura reducidos a la franja entre 8 AM y 10 PM; y se restringirá la circulación vehicular a nivel nacional. Además, los “bares, discotecas y centros de diversión nocturnas” deberán cerrar sus puertas. Las runiones en hogares, en tanto, deberán limitarse a 10 personas.
Además, a partir del martes el país sudamericano restringirá el ingreso de viajeros que arriben desde el Reino Unido, Sudáfrica (países donde se detectaron nuevas cepas), Austria y la Unión Europea (donde también se encontraron casos producto de esta variante del virus).
Aquellos que sí lleguen a Ecuador deberán realizarse un test rápido en el aeropuerto y los no residentes permanecerán durante cinco días en aislamiento preventivo. Los viajeros que no tengan resultados negativos, en tanto, deberán aislarse por 10 días desde su arribo, señala Infobae.
Ecuador fue uno de los países más afectados por la pandemia durante los meses iniciales de la primera ola, al extremo de que se registraron cuerpos en las calles de Guayaquil ante la imposibilidad de los trabajadores sanitarios y funerarios de hacer frente al exceso de muertes registrado. Actualmente, el país registra una cifra superior a los 206.000 casos positivos, mientras que las muertes reportadas son casi 14.000.
Las autoridades sanitarias ecuatorianas indicaron que las medidas son precautorias, considerando que en el Reino Unido los ingresos hospitalarios han subido drásticamente como consecuencia de la aparición de la cepa.
El consejero científico del gobierno británico, Patrick Vallance, explicó que esta variante del SARS-CoV-2, además de propagarse rápidamente, se está convirtiendo en la forma “dominante”, lo que conllevó “una subida muy fuerte” de los ingresos hospitalarios en diciembre. La nueva cepa habría aparecido a mediados de septiembre en Londres o en Kent (sureste), según él.