Actualmente la preocupación de los choferes de la península de Paraguaná va más allá de hacer colas por horas para llenar su tanque de gasolina. Esta vez, lo que preocupa es la baja calidad del combustible que hace que los vehículos fallen y empiecen a dañarse progresivamente.

Y es que el dolor de cabeza de los conductores viene cuando el carro empieza a «pistonear» o empiezan a fallar las bujías, el motor u otras piezas de la unidad. «Es un gasto mayor tener que acudir más seguido al mecánico y comprar los repuestos que se han dañado, en su mayoría, por la mala calidad de la gasolina», se quejó José Hernández. 

Al consultar con especialistas, mencionan que el problema se deriva en el escaso tratamiento químico que se le da a la gasolina en comparación con años anteriores, cuando las plantas llegaban a producir un índice de octanaje de hasta 97.

Entretanto, los conductores mencionan que solo por revisar el carro y hacerle algo simple pueden pagar unos 20 dólares como mínimo al mecánico, sin embargo «es la única opción que tenemos, pues es la gasolina que se está despachando en las distintas estaciones», dijo Hernández.

Cactus24 (06/05/2021).