En horas de la tarde de este domingo 29 de agosto se confirmó la muerte del exlíder negativo de la cárcel de Sabaneta, Edwin Ramón Soto Nava, alias el «Mocho Edwin», en Colombia.
El antisocial más conocido de Maracaibo, al parecer, se encontraba bajo los efectos del alcohol y sustancias psicotrópicas cuando tras sostener una fuerte discusión con su pareja actual se lanzó de un sexto piso.
Aparentemente, los vecinos de el «Mocho Edwin» llamaron a la policía por el escándalo que tenía y al verse rodeado decidió lanzarse por la ventana.
Hasta los momentos, los organismos de seguridad no confirman el fallecimiento de Soto Nava. Sin embargo, familiares y amigos ya tienen en sus estados de WhatsApp la condolencia por su deceso.
Fuentes policiales precisaron en una oportunidad que Soto cayó preso por primera vez en el año 2003 luego de que un ciudadano se le resistiera al robo en una calle de Maracaibo. Tres años más tarde asumió el control del área de Penal de Sabaneta luego de salir en libertad Javier Paz Herrera, alias “el Comandante Serizawa”, cuyo apodo proviene del plagio que conmocionó a la colectividad zuliana perpetrado contra una médica de origen japonés, Maritza Serizawa, quien fue secuestrada el 20 de febrero de 2000 cuando la profesional de la medicina se desplazaba en su vehículo. La galena fue liberada el 17 de agosto de ese año en la emergencia del Hospital General del Sur.
El conocido delincuente marabino fue capturado en el oriente del país y recluido en una prisión de la isla de Margarita, fue trasladado a la Cárcel Nacional de Maracaibo el pasado noviembre de 2011. Tras un motin, “El Mocho Edwin” controlaría las áreas de Penal, Patio, Máxima y Procenil.
Un reporte publicado por el diario El Impulso de Barquisimeto, que cita a funcionarios de la cárcel de Sabaneta, señaló que “El Mocho Edwin”, manejaba un presupuesto mil millonario por concepto de extorsión, secuestro, prostitución, venta de drogas, casinos clandestinos, donde cada preso debía hacer un aporte semanal en dinero al líder negativo y que permitió tener en su “nómina” a directores de cárceles, efectivos militares, custodios, policías, entre otros.
Fue él quien negoció la entrega del penal en septiembre de 2013. Evento que signó el cierre definitivo de la única cárcel que existía en Zulia.
Cactus24/30-08-2021