Tanto las autoridades armenias como las azerbaiyanas informaron de enfrentamientos en la frontera entre ambos países este martes. El más reciente conflicto, el más grande desde los combates en el enclave de Nagorno-Karabaj en noviembre del año pasado que dejaron más de 6.000 muertos, cesó tras la intervención rusa en la negociación de un alto al fuego entre ambas partes.

El enclave Nagorno-Karabaj volvió a ser lugar de fuertes enfrentamientos entre Azerbaiyán y Armenia este martes. Los dos países se culparon por haber iniciado el nuevo combate, en el que según el Ministerio de Defensa armenio una persona murió y 12 militares fueron capturados por las fuerzas azerbaiyanas. 

Los enfrentamientos de este martes alertaron de recrudecer, de nuevo, un conflicto que se ha prolongado durante años y que solo se estabilizó después de que Rusia mediara un acuerdo de paz el año pasado. A través del cual, Azerbaiyán recuperó varias partes del territorio de Nagorno-Karabaj que estaban bajo el control de las fuerzas étnicas armenias.

A raíz de los enfrentamientos, Rusia decidió intervenir y negociar entre las dos partes. En la mañana de este martes, el presidente ruso, Vladimir Putin, y el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinian, se comunicaron mediante una llamada telefónica para discutir la situación en la frontera. Y según la agencia de noticias Interfax, el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, también habló con los ministros de Defensa de ambos países. 

Horas más tarde, el Kremlin informó que los enfrentamientos habían cesado. 

«En estos momentos, los enfrentamientos en las montañas Kilisali han cesado. La situación se ha normalizado y está bajo control», informó el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.

El Ministerio de Defensa armenio confirmó la interrupción de los combates, mientras que, según Reuters, las autoridades azerbaiyanas no se han pronunciado, informa la agencia France24.

CACTUS24 16-11-21