Un enfermero de Arizona (EE.UU.) fue condenado este jueves a 10 años de prisión por abusar sexualmente de una mujer incapacitada y recluida en un centro de cuidados de larga duración, que quedó embarazada y posteriormente dio a luz.

Nathan Sutherland recibió la pena máxima establecida para el cargo de agresión sexual. También se le impuso libertad condicional supervisada de por vida, como condena por abuso contra un adulto vulnerable, derivada del trato que dio a la mujer.

El embarazo de la víctima se descubrió en diciembre de 2018, cuando una empleada del centro Hacienda Healthcare, en Phoenix, estaba cambiando de ropa a la paciente, que entonces tenía 29 años, y se dio cuenta de que estaba en proceso de dar a luz. Los empleados alertaron a la Policía y aseguraron desconocer que estaba embarazada.

Posteriormente, las autoridades declararon que el ADN del enfermero coincidía con una muestra tomada del hijo de la mujer. La víctima, que vivió en el centro de cuidados durante 26 años, padece condiciones médicas que se derivan de un trastorno cerebral que, además de pérdida de la visión, le causó deficiencias cognitivas y motoras, por lo que no tiene uso funcional de sus extremidades.

«Es difícil imaginar un adulto más vulnerable que la víctima en este caso», dijo la jueza del Tribunal Superior, Margaret LaBianca, y resaltó que el acusado explotó su posición de confianza como cuidador para abusar sexualmente de la mujer.

Antes de que se le impusiera la sentencia, Sutherland habló ante el tribunal sobre los problemas que ha tenido en la vida por haber sido dado en adopción cuando era niño. También ofreció disculpas a la víctima y a su familia y dijo entender que la situación tampoco es justa para el niño, que estará bajo el cuidado de la madre de la paciente.

«A la víctima, lo siento», dijo Sutherland. «No te merecías que te hicieran daño, independientemente de lo que ocurriera en mi vida personal y de los demonios con los que estaba luchando. No tenía derecho a hacerte pasar por eso», agregó.

CACTUS24 03-12-21