Los británicos no pueden utilizar el túnel bajo el Canal de la Mancha desde hace varios días para transitar por carretera a través de Francia con el fin de regresar a su residencia europea, en virtud de las normas de circulación establecidas por Francia para frenar la epidemia de covid-19, creando confusión en la frontera.

El bloqueo afecta a los británicos que residen oficialmente en un país de la Unión Europea distinto de Francia y que pasan habitualmente por Francia para ir allí, como ocurre en este período de regreso de las fiestas.

Los que residen en Francia no se ven afectados por la normativa.

«A menos que tengan una residencia francesa, los británicos son ahora considerados ciudadanos de países fuera de la Unión Europea y ya no pueden transitar por Francia por carretera para llegar a su país de residencia dentro de la UE», tuiteó el miércoles por la noche Eurotúnel, la filial del grupo Getlink que gestiona el túnel bajo el Canal de la Mancha, evocando una decisión del gobierno francés del 28 de diciembre.

Lo mismo ocurre con los transbordadores. «Sólo aquellos que posean una residencia en Francia podrán ingresar a Francia», escribió en un tuit la compañía P&O Ferries.

El ministerio del Interior, por su parte, respondió a la AFP que no se habían producido cambios en las normas y que se trataba de la aplicación de las consignas en las fronteras.

«Los británicos, incluso los beneficiarios del acuerdo de retirada -que les permite por el momento ser dispensados de un permiso de residencia- son ciudadanos de países fuera de la UE», precisó el ministerio. «Por lo tanto es lógico que se les aplique las mismas normativas que a los demás ciudadanos oriundos de países fuera de la UE y no se les permita transitar hacia otro país de la Unión Europea».

La aplicación de estas normas ha sorprendido a los pasajeros británicos que habían previsto utilizar el Eurotúnel para regresar a su país europeo de residencia, algunos de los cuales testificaron en Twitter que se les había denegado el acceso al túnel justo antes del embarque.

«¡Estoy completamente perdida, no tiene sentido!», explicó la británica Fiona Navin Jones a la AFP, actualmente en Gran Bretaña y que debía regresar el jueves en coche con sus hijos, su marido y su perro a Bélgica, donde vive desde hace 14 años.

Había viajado para pasar Navidad con su familia y se encuentra en la imposibilidad de tomar el mismo camino de vuelta. «Ahora no tengo derecho a volver a casa», constata esta profesora, estimando que se trata de una «cuestión de Brexit disfrazada con covid».

Cactus24 30-12-21