“No existe tal cosa como una garantía de entrada para un no ciudadano a Australia. Más bien,hay criterios y condiciones para la entrada, y motivos para la denegación o cancelación de un visado”, sostienen los abogados del Ministerio del Interior australiano en un documento presentado la noche del domingo ante el tribunal que estudia la deportación del tenista.

Djokovic, el número uno del mundo, es la esperanza de ganar su 21 Grand Slam en el Abierto de Australia, que comienza en Melbourne el 17 de enero Pero en lugar de entrenamiento, el jugador serbio ha sido confinado en un hotel utilizado por los solicitantes de asilo y está desafiando la decisión de cancelar su visa después de ser detenido a su llegada al aeropuerto de Melbourne el jueves temprano.

Djokovic, un opositor vocal de los mandatos de vacunas COVID-19, dijo en una presentación ante el tribunal el sábado que se le otorgó una exención de vacunación debido a que tuvo el virus en diciembre.

Sus abogados dijeron que tenía los permisos necesarios para ingresar a Australia, incluida una evaluación del Departamento del Interior de que las respuestas en su formulario de declaración de viaje indicaban que cumplía con las condiciones para una llegada libre de cuarentena. El gobierno cuestionó esto.

Dijo que el correo electrónico del departamento no era una garantía «de que se aceptaría su llamada ‘exención médica'», y sus respuestas podrían ser cuestionadas y verificadas a su llegada.