El sector San Antonio de la ciudad de Coro está ubicado a pocos metros de la Plaza San Antonio y del corredor vial avenida Manaure, una de las vías comerciales de la capital falconiana.

Entre las calles Ampíes, Democracia, Borregales y Comercio, se encuentran cuatro botaderos de basuras improvisados.

Terrenos baldíos no cercados por sus dueños que los vecinos de la comunidad y comerciantes utilizan para arrojar los desechos sólidos por la ausencia de contenedores de basura.

Cactus24 recorrió el sector y conversó con sus habitantes, quienes expresaron estar rendidos en lo que han denominado «una batalla» contra la contaminación y la falta de respuestas de las autoridades.

«Cada terreno tiene su dueño, la gente arroja la basura porque no pasa el camión del aseo y luego la queman», explicó un vecino de 40 años quién jugaba con su mascota debajo de un árbol de mamón dentro del terreno de un antiguo un centro de refugio para menores de edad en condición de vulnerabilidad.

La basura arrojada no es recogida por el Instituto de Aseo Urbano de Coro, por lo tanto, los habitantes son víctimas de ciudadanos que en las madrugadas optan por quemar los desechos sólidos. La decisión se ha escapado de las manos de sus habitantes, pues nadie confiesa ni reconoce quién enciende la llama en la madrugada.

«La queman de madrugada, pero no sabemos quién es, esa es la gran pregunta», dijo para Cactus24 un habitante que vive al frente del segundo botadero ubicado en la calle Borregales. Solicitó no publicar su identidad por temor a represalias.

Los vecinos contaron que una de las familias afectadas por la quema de basura es la familia Ordoñez, que han sufrido episodios de asma. Cactus24 intentó conversar con ellos, pero no fue posible.

Serpientes, mamíferos, insectos y contaminación ambiental es el día a día de los habitantes de esta comunidad. Solicitan una pronta solución, pues la basura acumulada ha llegado a convertirse en grandes toneladas de desperdicios.

CACTUS24 08-08-22