Corea del Sur y Estados Unidos llevan a cabo desde este lunes una serie de ejercicios militares conjuntos, reanudando de esa forma el plan suspendido hace cuatro años por las crecientes amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte, recoge Yonhap.

Las maniobras, bautizadas Ulchi Freedom Shield (UFS), se prolongarán hasta el 1 de septiembre, e incluyen tres elementos clave: ejercicios de simulación de puesto de mando por ordenador, entrenamiento sobre el terreno y ejercicios de defensa civil.

El plan se realizará en dos etapas: la primera consistirá en una serie de maniobras para repeler ataques norcoreanos y defender el área capital nacional de Seúl, mientras que la segunda se centrará en operaciones de contraataque.

Durante el primer segmento, el Ejército surcoreano efectuará simultáneamente simulacros de varios escenarios reales durante cuatro días. En particular, recrearán la detección de artefactos explosivos improvisados en centrales nucleares, el incendio de una fábrica de semiconductores, la paralización de una red bancaria, actos terroristas en aeropuertos y ataques con drones, informó el Ministerio de Defensa.

En total, en el marco del UFS, los aliados tienen previsto llevar a cabo 13 programas de entrenamiento conjunto sobre el terreno.

La segunda parte consistirá en la evaluación de la capacidad operativa plena de un programa diseñado para comprobar las capacidades de Seúl de dirigir las fuerzas combinadas de los aliados.

Además, este es el primer entrenamiento de campo para operaciones de guerra en el que el Ejército surcoreano ha provisto a sus tropas de primera línea con emblemas religiosos. Se trata de una iniciativa que tiene como objetivo ayudar a los soldados a levantar su ánimo.

Cactus24 22-08-22