La utilización de redes sociales que se viene manejando sin ningún tipo de control en chicos y adolescentes del estado Táchira y resto de la nación ha causado que se aceleren los inconvenientes de identidad sexual en esta población infantil que podrían concluir en casos de depresión y luego en el suicidio.

La alerta fue emitida por el psicólogo, Alfonso Amaya, quien fue enfático al mencionar que la crisis humanitaria compleja hizo que alrededor de 6 millones de venezolanos abandonaran Venezuela en búsqueda de mejores oportunidades, señala La Prensa del Táchira.

Al no estar presente la figura materna y paterna, los chicos y jóvenes llegan a desarrollar «el síndrome de Argos, puesto que gracias a la falta de sus papás, tíos o primos se someten a distintas fases de duelo al perder cada una de sus fuentes emocionales más cercanas», manifestó.

«Esto podría producir adicciones en ellos, debido a que los trastornos incrementan en esos chicos que padecen de violencia en sus domicilios o fuera de ellos, puesto que en varios casos esta población es abusada por alguien cercano de su familia», apuntó.

Para el especialista, el suicidio infantil fue un asunto que ha quedado invisibilizado, por lo que es fundamental que el Estado tome bastante en serio las políticas referente a la salud psicológica de los chicos y adolescentes.

En Venezuela, en el año 2019 se suicidaron 88 chicos, en el año 2020 en el primer semestre la cifra perteneció a 8, según cifras manejadas por la Organización no gubernamental Centros Comunitarios de Aprendizajes.

Dificultades

El director del Observatorio Venezolano de Violencia en el estado Táchira, Yensi Meneses, dijo que a consecuencia de la movilidad fronteriza muchos niños se quedaron sin sus padres, lo que generó una limitación para continuar con sus actividades diarias.

«Poseen complejidad para aceptar cambios de papeles, y un caso muestra de eso es que si el adolescente es el más grande de los hijos queda al mando de sus hermanos menores, lo que hace que este púber tenga una carga psicológica distinta y un cambio de lo cual entendía como familia».

La carencia de solidez en sus principios morales, garantiza el experto, se incrementa la iniciativa de suicidio en menores de edad.

«Vemos que seguimos viviendo en una sociedad homofóbica y machista que hace que aquellos adolescentes que no se identifican con la heterosexualidad van a creer que su familia no los va a aceptar y por lo tanto buscarán la vía del suicidio como un escape».

Todas estas implicaciones hacen que quieran acabar con su vida, cuando la prioridad es buscar ayuda.

Es por ello, que el abogado instó a priorizar el tema de la salud mental.

Cactus24 (12-09-2022)