Este lunes el diputado a la Asamblea Nacional, Gilber Caro, relató en el programa Vladimir a la Carta que está recuperándose de «grandes heridas emocionales» tras salir por tercera vez de la cárcel como preso político y dijo que ha sido muy difícil lidiar con la «intolerancia de los venezolanos», luego de ser recientemente excarcelado.

«No me quiero adentrar ahorita en la política porque tengo muchas heridas emocionales», expresó.

Caro aseguró que se encuentra en un proceso de adaptación y de acompañamiento psicológico por lo que prefirió abstenerse de ahondar sobre el escenario político actual del país. Sin embargo destacó que se «mantiene fiel» a su organización política Voluntad Popular.

«Es muy fácil opinar desde un hotel 5 estrellas campaneando un whisky y comiéndose un caviar bien chévere y muy distinto es hablar desde abajo de una escalera donde dormí 8 meses, donde no podía estirar los brazos hacía los lados ni tenía baño para mis necesidades», sentenció.

Destacó en sus declaraciones que sufrió tortura psicológica, «estuve estos meses en una celda oscura; mi familia no sabía dónde estaba; duré casi 15 días sin poder cepillarme. Estoy con mi psicóloga tratando mi pasado», dijo, y agregó que fue mantenido aislado, sin la posibilidad de ver a los otros presos; sólo le permitían salir de su celda 30 minutos en la mañana y 30 minutos en la tarde.

«La intolerancia me ha dado hasta con el tobo», enfatizó. Finalmente dijo que su inmunidad parlamentaria como diputado ante la Asamblea Nacional fue «irrespetada».

Cactus24/07-09-2020