Fue el líder norcoreano el que primero solicitó volver a usar la comunicación telemática entre los dos países, contaron en rueda de prensa los parlamentarios Kim Byung-kee y Ha Tae-keung, tras recibir los detalles por parte de funcionarios del espionaje surcoreano durante una sesión del comité de Inteligencia.

El pasado martes se anunció que Pyongyang aceptaba retomar la comunicación a distancia con Seúl trece meses después de optar por dejar de usar estas líneas en protesta por el envío, mediante globos, de propaganda contraria al régimen por parte de activistas desde el Sur.

«Corea del Sur y Corea del Norte están hablando regularmente dos veces al día», explicaron en declaraciones que recoge la agencia Yonhap los parlamentarios citando lo que les reportó el Servicio Nacional de Inteligencia (NIS).

A su vez, según el NIS surcoreano, el paso dado por Pyongyang muestra expectativas por parte del régimen para que Seúl ayude a «revivir en el futuro» el diálogo sobre desnuclearización con Washington, estancado desde 2019.

Según la inteligencia surcoreana, el Norte querría actualmente quedar exento de las sanciones que castigan sus exportaciones de mineral y sus importaciones de productos petrolíferos refinados y otros bienes como requisitos para sentarse a la mesa de nuevo con Estados Unidos.

Corea del Norte ha decidido volver a comunicarse con su vecino del Sur, con quien técnicamente sigue en guerra, en un momento en el que atraviesa la mayor crisis económica en más de dos décadas debido al cierre hermético de fronteras que ha impuesto para combatir la pandemia, el cual se suma al aluvión de sanciones que ya soporta.

El NIS también cree que el mensaje enviado por Pyongyang el fin de semana advirtiendo sobre el efecto negativo que tendría celebrar las maniobras militares conjuntas que Seúl y Washington tienen previsto realizar este mes parece indicar que aplicaría medidas correspondientes si se suspenden los mencionados juegos de guerra.

Por último, la inteligencia sureña descartó que Kim Jong-un tenga problemas de salud después de que en la última semana los medios norcoreanos lo mostraran llevando una venda adhesiva en la parte posterior de la cabeza, donde días después se pudo apreciar una marca o cicatriz de origen desconocido.