El Monstruo de Chiclayo, calificativo que se ganó Juan Antonio Enríquez García después de secuestrar y violar a una niña de 3 años en Perú, fue hallado muerto en su celda.

Enrique Fernández se habría ahorcado en la celda donde permanecía detenido y cumpliendo los nueve meses de prisión preventiva que le dictaron tras su detención por el polémico caso que conmocionó a todo Perú y la comunidad internacional.

El Monstruo de Chiclayo fue el apodo con el que comenzó a ser llamado después de haber secuestrado y violado a la niña de 3 años. El secuestro quedó registrado en cámaras de seguridad que captaron el vehículo usado como medio de transporte por medio del cual lo identificaron y rastrearon. Desafortunadamente cuando autoridades dieron con la niña, ésta agonizaba producto de las lesiones provocadas por el aberrado sexual.

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Juan Antonio estaba recluido en el Establecimiento Penitenciario de Challapalca donde una persona de seguridad lo encontró colgado de una tela blanca sujeta a los barrotes. Estaba recluido en este lugar desde el 20 de abril aislado de la población penitenciaria que le había jurado la muerte. Lo hallaron muerto este martes a las 9:50 de la mañana.

Gerardo Morón Sánchez
Cactus24 24-05-22